CONTENIDOS:
Contenidos: Educación, arte y
cooperación.
Objetivos:
Desarrollar la motivación entre los niños.
Interaccionar con los demás a través del
dibujo y el contacto entre compañeros.
Fomentar la cooperación, la afectividad y
las relaciones sociales.
Potenciar la creatividad y los sentidos.
Métodos: Se realizarán diversas actividades y
juegos de carácter lúdico, desarrollando los sentidos. Por ejemplo, una
actividad sería vendar a los niños los ojos poniéndoles diferentes alimentos y
que ellos los discriminen.
Además,
se llevarán a cabo actividades grupales, como actividades para fomentar la
interacción y comunicación, como realizar grupos y que todos quieran conseguir
un mismo fin.
También actividades de imitación y
representaciones dramáticas, además de actividades variadas de manualidades y
pintura.
Temporalización: Las actividades se
llevarán a cabo durante el curso, en sesiones de 25-30 minutos.
Evaluación: La técnica
fundamental será la observación directa y sistemática, la cual llevaremos un
control de los niños durante tres fases: antes, durante y después. De esta
manera, sabremos los conocimientos previos que tienen los niños, así como su
evolución a lo largo del curso, detectando déficits y el desarrollo de los
niños en el proceso de aprendizaje. Evaluando al finalizar los resultados y su
ya dicho desarrollo.
RESUMEN
El niño comienza a expresarse desde el
nacimiento. El niño, no menos que el adulto, posee tales estados de ánimo y
desea expresarlos.
El juego es la forma más evidente de
expresión libre en los niños. La teoría lúdica cuenta con una gran estirpe muy
respetable de filósofos y psicólogos, como Kant, Schiller, Froebel, Spencer,
etc.
Froebel por ejemplo, sostenía que “el
juego es la expresión más elevada del desarrollo humano en el niño, pues sólo
el juego constituye la expresión libre de lo que contiene el alma del niño”.
Sin embargo, Spencer consideraba el juego
de los niños como una descarga de energía sobrante.
Según Lowenfeld, “el juego infantil es
expresión de la relación del niño con la totalidad de la vida y no es posible
teoría lúdica alguna que no cubra también la totalidad de la relación del niño
con su vida.
Montessori también hizo varias
aportaciones, por ejemplo, ella pensaba que el dibujo no puede o debe
enseñarse, sino que debía constituir una actividad espontanea, una expresión
libre del ser del niño y de sus propios pensamientos.
Sully considera la actividad artística
como continua con la actividad lúdica. El impulso lúdico se convierte en
impulso artístico. Distingue las diversas etapas del desarrollo, comenzando con
el garabato sin objeto, pasando por el diseño primitivo y llegando a la figura
humana.
Las etapas del desarrollo son:
1. Garabato (2-5años):
Garabato sin finalidad, localizado, imitativo y finalmente con sentido.
2. Línea (4 años): La
figura humana se convierte en el tema favorito.
3. Simbolismo descriptivo
(5-6 años): La figura humana es reproducida con exactitud.
4. Realismo descriptivo
(7-9 años): Los dibujos son más lógicos que visuales.
5. Realismo visual (9-10
años): Pasa de la etapa del dibujo a base de memoria al dibujo de la
observación de la naturaleza.
6. Represión (11-14 años):
Preferencia hacia diseños convencionales
7. Despertar artístico
(comienzos de la adolescencia): Los dibujos relatan algo.
En cuanto al esquema, el niño artista
emplea simultáneamente para el mismo tema dos estilos distintos de
representación: uno para su propia satisfacción personal y otro para
satisfacción de los demás.
Hablando de la imagen y el sonido. Existen
tres términos: signos, imagen y representación.
Los primeros dibujos de un niño al
principio parecen no figurativos, pero si los miras
detenidamente son símbolos reconocibles.
La relación del esquema con la imagen de
la mente del niño es difícil. Hay tres hipótesis:
· La teoría de esfuerzos para lograr la imitación
exacta.
· Incapaz de traducir sus imágenes a dibujos.
· El niño trata de escapar de sus imágenes a un realismo, a medida que
adquiere pensamiento aumenta el realismo de sus dibujos.
Los autores se han visto
hasta ahora obligados a ver en el “esquema” el primer intento del niño por
representar un concepto, “primero pienso y luego dibujo mi pensamiento”.
La falacia se remonta a
Sully quién dice que el niño pierde su “inocencia” primitiva en una
edad muy temprana, puesto que, se va sofisticando en el sentido de que en lugar
de ver lo que realmente se le representa, ve lo que el conocimiento y la lógica
le dicen que es lo que tiene delante.
El autor realiza una
clasificación por categorías tras examinar una serie de dibujos, estas
categorías, se comparan con los cuatro tipos de percepción, los cuales
diferencia Bullough.
Relación de las categorías con los tipos
funcionales: El pensamiento tiene en cuenta el objeto y sus relaciones orgánicas,
el resultado es un dibujo todavía objetivo y naturalista.
Relación con los tipos preceptúales: La
característica del tipo fisiológico o intrasubjetivo de Bullough era una
relación personal directa ante los efectos orgánicos del color.
Los primeros dibujos para la
diferenciación de los tipos: La decoración se incluiría en la categoría
estructural, quedando excluida la expresionista.
Es necesario el seguimiento de
varios dibujos para así comprender la evolución que puede presentar el niño.
A
parte del método plástico como forma de expresión también nos encontramos con
otros modos no visuales de expresión. En el juego nos encontramos con
tres tipos de niños:
1.
El niño que está completamente aislado.
2.
Niños que juegan de manera individual
3.
Niños que juegan con sus compañeros.
También
nos encontramos con invenciones verbales siendo un monólogo
interior el que exteriorizan éstos, ya sea de forma escrita o verbal.
Por
último, nos encontramos con la música.
No
sólo nos tenemos que quedar con que el niño quiere representar algo sino que
hay que preguntarse por que necesita exteriorizar ese sentimiento.
REFLEXIÓN
En la etapa infantil, el juego es el
factor más importante, debido a que, mediante él los niños aprenden, a la vez
que interactúan y se divierten.
En esta etapa, es cuando los niños
empiezan con sus primeros garabatos, pasando poco a poco a ser un dibujo más
centrado a la realidad.
Para nosotras, el dibujo en los niños es
muy importante, por ello, hay que dejarlos que se expresen libremente, no
imponiéndoles lo que pretendemos que dibujen, o de qué manera
tendrían que dibujarlo. Para los niños, el dibujo que realizan, está en su propia
mente, en su imaginación, por lo que debemos motivarlos a que expresen mediante
el dibujo sus gustos y preferencias.
TRABAJO REALIZADO POR:
- Almudena Díaz Vera.
- Rocío Carrasco Balsas.
- María Huertas Méndez Martínez.
- María José Navarro Parra.
- M. José Quiñonero López.
- María José Fernández Alcazar.